Enfoque
Hubo un tiempo, no demasiado lejano, en que las niñas y mujeres no tenían acceso a la educación. Hay un tiempo y un espacio en que las niñas y mujeres siguen sin tener acceso a la educación. En este trabajo, en el que abordamos la coeducación, partimos del derecho a la educación de las mujeres logrado en nuestro contexto socio-cultural, pero no queremos dejar pasar la oportunidad de denunciar la situación de desigualdad y opresión extrema que millones de niñas y mujeres siguen sufriendo en todos los ámbitos de su vida y, por supuesto, también en la educación. La igualdad entre mujeres y hombres es una cuestión clave para lograr la equidad y paridad de la sociedad. Los sistemas educativos formales, y la educación en general, se hacen permeables a esta problemática y contribuyen, o deben hacerlo, a mitigar toda desigualdad por razón de sexo entre mujeres y hombres. Garantizar una educación inclusiva y equitativa de calidad y promover oportunidades de aprendizaje permanente para todos es una propuesta de meta a lograr por los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS 4: Educación de calidad). La educación de las mujeres (desde la infancia), es una vindicación largamente perseguida por el feminismo. Podría decirse que es una de las piedras angulares de su nacimiento al amparo o bajo la luz de la Ilustración. Sin embargo, y aunque en nuestro contexto socio-cultural el acceso a la educación de las mujeres está plenamente consolidado y protegido jurídicamente, la realidad es que todavía es posible detectar que la educación ofrecida en el sistema educativo (en todas sus etapas) sigue teniendo tintes androcéntricos. El currículo formal y el oculto o las relaciones que se formalizan entre uno y otro sexo, siguen manteniendo a las mujeres en posición subordinada respecto al hombre. Frente a la reproducción social de la desigualdad, implementar la coeducación en la escuela se erige como herramienta de justicia social para superar dicha desigualdad histórica y estructural. Siendo este un trabajo eminentemente de reflexión teórica feminista, el objetivo principal es el de vindicar la coeducación como herramienta pedagógica que, de manera transversal, fomenta la educación en igualdad entre mujeres y hombres. Metodológicamente, se realiza una revisión de la literatura científica sobre conceptualización, teorización y práctica de la coeducación, así como de su abordaje en la legislación educativa. Como conclusiones, se incide en la necesidad de implementar de manera real y efectiva la coeducación, no confundiéndola, de manera premeditada o inconsciente, con la otras prácticas de aula que no tienen como sujeto político y específico de intervención a las niñas ni como objetivo último el de paliar la desigualdad estructural entre mujeres y hombres.
Elena Garay Tejería
Comentó el 29/09/2023 a las 08:31:05
Hola,
en primer lugar felicitar por la claridad de la ponencia. Me ha gustado especialmente ese recorrido presentado de la línea de tiempo que detalla los cambios sufridos en la educación en función del gobierno o situación política.
Mi pregunta en relación con la coeducación y contextualizando el tema en la actualidad, además de implantar estrategias, metodologías, pautas y, por lo tanto, desarrollar una estructura sólida que verifiqué la implantación de esta en el propio aula, ¿hay alguna estrategia o plan fuera del aula como por ejemplo, en las zonas de ocio de los colegios o institutos?
Muchas gracias,
Belén Suárez lantarón
Comentó el 28/09/2023 a las 10:34:32
Mucha gracias por tu interés, Paula.
Efectivamente es importante formar en estas cuestiones -y más si hablamos de futuros docentes-
Desde mi punto de vista, se puede introducir la coeducación como modelo en nuestras aulas, a través de los trabajos de equipo o de los trabajos fin de estudios, pero también dedicando algún momento de las explicaciones de nuestra materia a reflexionar sobre el papel de la mujer... la discriminación por género... Es algo que puede incluirse en cualquier materia de cualquier área de conocimiento.
Paula Martínez Enríquez
Comentó el 27/09/2023 a las 21:32:16
Estimadas Nuria y Belén,
Agradezco la exposición detallada y reflexiva sobre la importancia de la coeducación como herramienta pedagógica para fomentar la educación en igualdad entre mujeres y hombres tan imprescindible en la actualidad.
Por lo tanto, me gustaría saber cuáles son las estrategias concretas y prácticas que consideráis más efectivas para mejorar la formación de docentes en la implementación de enfoques coeducativos y para que puedan desafiar las estructuras educativas que históricamente favorecen a un género sobre otro y si, además, habéis podido llevar a cabo ya algunas de ellas y, por lo tanto, vivido la experiencia y los resultados de la misma.
Agradezco de antemano vuestra respuesta y enriquecimiento del tema desde esta perspectiva esencial, ya que considero que su ponencia es muy relevante y me ha servido de gran inspiración.
Muchas gracias,
Paula Martínez
Nuria García Perales
Comentó el 29/09/2023 a las 18:38:46
Hola, Paula
Muchas gracias por tu interés en nuestro trabajo.
En la formación inicial y continua del profesorado, entendemos que es necesaria la aplicación de enfoque de género y perspectiva feminista de manera integral. Abogaríamos, sin duda, por que el alumnado de las facultades de educación (aunque dichas perspectivas pueden y deberían ser aplicadas a todas las áreas de conocimiento) cursara, al menos, algunos créditos de coeducación. En la formación continua del profesorado, hay espacios que sí imparten talleres o seminarios sobre coeducación. Es importante, eso sí, revisar si es realmente coeducación o si se trata de disfrazar otras teorías de coeducación cuando poco o nada tienen que ver con la igualdad y no ponen en el centro a las niñas y las mujeres.
Nos dices que históricamente las estructuras educativas han favorecido "un género". Me gustaría matizar, sin pretender aleccionar y segura de que lo sabes, y decir que no ha favorecido a "un género", sino a un sexo. La opresión y subordinación de las mujeres es por nuestro sexo, y el género es la herramienta que utiliza el patriarcado para llevar a cabo dicha subordinación; por tanto, género (como constructo cultural) y sexo (como realidad material biológica) no son intercambiables. Repito que estoy segura que lo sabes de sobra, pero en la actualidad se está asimilando género y sexo (de manera consciente muchas veces, otras por desconocimiento), causando graves perjuicios a la causa de las mujeres.
Perdón por extenderme tanto. Y ahora a lo que preguntas sobre estrategias concretas. Algunas estrategias que podemos enseñar o fomentar en el profesorado, pueden ser:
-Mostrar cuál ha sido la contribución de las mujeres a lo largo de la Historia en las diferentes áreas de conocimiento y las artes. Existen ya muchos trabajos que visibilizan las contribuciones de las mujeres a la ciencia, la literatura, la pintura, la música, la pedagogía, etc.
-Explicar qué es el feminismo y su genealogía. Somos conscientes de que todavía existen resistencias (a veces por desconocimiento) sobre qué es y qué objetivos persigue el feminismo.
-Utilizar comunicación y lenguaje no sexista.
-Segregar las estadísticas por sexo de las investigaciones que llevemos a cabo, incluso aunque sean simplemente las reflexiones de aula sobre la práctica docente.
-Dar la oportunidad a las niñas de ocupar puestos de liderazgo.
-Fomentar en el aula y en los espacios escolares la distribución paritaria del tiempo y los espacios.
Si tienes interés en el tema, te recomendamos visitar la página de DoFemCo, donde encontrarás recursos, libros, etc. sobre coeducación.
Esperamos que te sirva esta aportación. Muchas gracias de nuevo por tu preocupación e interés en el tema.
Un abrazo,
Nuria
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